El salmantino realiza lo más destacado de la tarde y sólo la espada le privó de abrir la puerta grande
APLAUSOS
Eduardo Gallo realizó lo más destacado de la
tarde. El salmantino salió a triunfar y se le vio muy despejado de
ideas, valiente y pisando terrenos de compromiso con mucha verdad y
firmeza. Su primero salió muy parado impidiendo el lucimiento con el
capote de Eduardo Gallo. Pero se dejó torear el toro en la muleta, donde
tuvo calidad y aunque le costaba repetir y miraba mucho al torero, sus
embestidas tuvieron recorrido cuando tomaba el engaño. Gallo lo
aprovechó siempre en la corta distancia, pisando con firmeza terrenos
comprometidos para tirar del toro. Faena muy compacta y templada de un
Gallo valiente, que pisó en todo momento con determinación. Faena basada
sobre la diestra. Buena estocada de efecto fulminante, decisiva para
cortar la primera oreja de la tarde.
Gallo brindó la faena de su segundo a su nuevo apoderado Mateo Carreño. Gusto y empaque hubo en el comienzo con la franela, con trincherazos muy sentidos. Bueno fue el toro de Rancho Seco, que repitió con transmisión. El salmantino supo ligar con templanza, tirando bien del astado para llevarlo siempre toreado. De nuevo eligió los terrenos de la corta distancia para plantear faena. Los arrimones finales con un valor frío llegaron mucho al público, al igual que las manoletinas. Entró a matar y tras pinchar, siguió con la faena dejando algunas bernadinas. Pinchó de nuevo, emborronando una notable faena y cerrándose la puerta grande. Mató al cuarto intento.
Se gustó Angelino de Arriaga en el saludo
capotero al tercero, con verónicas muy acompasadas. Vistoso el quite por
chicuelinas abriendo el compás. Brindó a Luis Marco, dueño de la plaza
de Cinco Villas. El mexicano se mostró muy por encima del toro, al que
le dio tiempo y sitio en una faena serena e inteligente, demostrando
buen corte de torero y pureza en su concepto. Perdió la opción de cortar
alguna oreja tras fallar con la espada, matando al segundo intento.
El sexto manseó en banderillas, apretando hacia los adentros y cogiendo al banderillero Juan Ramón Saldaña de fea manera, golpeándose fuertemente en las tablas y estribo luxándose el hombro izquierdo y sufriendo una cornada en el glúteo derecho. El toro no ofreció posibilidades en la muleta, donde se mostró apagado y deslucido, sin que Angelino de Arriaga pudiera redondear.
El primero fue un toro de una embestida
desclasada y áspera que no permitió estar a gusto a Israel Téllez, que
mostró voluntad y extrajo algún muletazo a base de insistir y no
aburrirse. Mucha voluntad pero poco lucimiento.
No se acopló Téllez con el manejable cuarto, en una labor deslucida y anodina que no gustó a la concurrencia. Estuvo muy desafortunado con la tizona. Pitos.
México. Domingo 22 de diciembre. Toros de Rancho Seco, desiguales de presentación y de escaso juego. ISRAEL TÉLLEZ: Silencio y pitos; EDUARDO GALLO: Oreja y vuelta al ruedo tras aviso; ANGELINO DE ARRIAGA: Palmas y silencio. Entrada: Menos de un quinto. El banderillero Juan Ramón Saldaña fue cogido por el sexto sufriendo una luxación del hombro izquierdo y una cornada en el glúteo derecho.
Gallo brindó la faena de su segundo a su nuevo apoderado Mateo Carreño. Gusto y empaque hubo en el comienzo con la franela, con trincherazos muy sentidos. Bueno fue el toro de Rancho Seco, que repitió con transmisión. El salmantino supo ligar con templanza, tirando bien del astado para llevarlo siempre toreado. De nuevo eligió los terrenos de la corta distancia para plantear faena. Los arrimones finales con un valor frío llegaron mucho al público, al igual que las manoletinas. Entró a matar y tras pinchar, siguió con la faena dejando algunas bernadinas. Pinchó de nuevo, emborronando una notable faena y cerrándose la puerta grande. Mató al cuarto intento.
Se gustó Angelino de Arriaga en el saludo
capotero al tercero, con verónicas muy acompasadas. Vistoso el quite por
chicuelinas abriendo el compás. Brindó a Luis Marco, dueño de la plaza
de Cinco Villas. El mexicano se mostró muy por encima del toro, al que
le dio tiempo y sitio en una faena serena e inteligente, demostrando
buen corte de torero y pureza en su concepto. Perdió la opción de cortar
alguna oreja tras fallar con la espada, matando al segundo intento.El sexto manseó en banderillas, apretando hacia los adentros y cogiendo al banderillero Juan Ramón Saldaña de fea manera, golpeándose fuertemente en las tablas y estribo luxándose el hombro izquierdo y sufriendo una cornada en el glúteo derecho. El toro no ofreció posibilidades en la muleta, donde se mostró apagado y deslucido, sin que Angelino de Arriaga pudiera redondear.
El primero fue un toro de una embestida
desclasada y áspera que no permitió estar a gusto a Israel Téllez, que
mostró voluntad y extrajo algún muletazo a base de insistir y no
aburrirse. Mucha voluntad pero poco lucimiento.No se acopló Téllez con el manejable cuarto, en una labor deslucida y anodina que no gustó a la concurrencia. Estuvo muy desafortunado con la tizona. Pitos.
México. Domingo 22 de diciembre. Toros de Rancho Seco, desiguales de presentación y de escaso juego. ISRAEL TÉLLEZ: Silencio y pitos; EDUARDO GALLO: Oreja y vuelta al ruedo tras aviso; ANGELINO DE ARRIAGA: Palmas y silencio. Entrada: Menos de un quinto. El banderillero Juan Ramón Saldaña fue cogido por el sexto sufriendo una luxación del hombro izquierdo y una cornada en el glúteo derecho.
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